San Vicente de la Barquera es una de las villas más bonitas y turísticas de Cantabria y es que goza de un espectacular casco histórico conocido como la Puebla Vieja y además se encuentra situado en un idílico entorno, el espectacular parque natural de Oyambre.

Ubicación

San Vicente de la Barquera es un municipio de la comarca de la Costa Occidental, localizado en Cantabria.

Cómo llegar

Se sitúa a 58 kilómetros de Santander. El término municipal está atravesado por la autovía del Cantábrico (A-8), por la carretera nacional N-634, entre los pK 265 y 272 y por la carretera autonómica CA-131, que conecta con Comillas.

Dónde aparcar

San Vicente dispone de varios parkings gratuitos, uno se encuentra en P.º de la Barquera, 49-39, otro en Av. Miramar. Si queréis aparcar en otras zonas del pueblo debéis tener en cuenta que hay zona O.R.A. y que debéis pagar, a menos que logréis encontrar sitio en la zona blanca que es gratuita.

Mapa turístico

Qué ver

Iglesia de Santa María de los Ángeles

Fue construida durante un largo período de tiempo, entre los siglos XIII y XVI, muy posiblemente sobre otra iglesia anterior.
Forma un conjunto armonioso y fuerte en el que se acusan las características del gótico montañés.
En el exterior destaca su gran torre y sus dos puertas románicas de austera belleza.

Santuario de la Barquera

Se encuentra situado en un bucólico lugar junto a la entrada del puerto, lugar en el que según la tradición cuenta que apareció la Virgen de la Barquera, patrona del municipio hace ya muchos siglos.

El templo fue construido en la Edad Media, siendo las primeras referencias escritas conservadas del siglo XV. 

Palacio de la familia Corro

Este palacio renacentista que actualmente acoge la sede del Ayuntamiento de San Vicente de la Barquera, fue mandado construir en el siglo XVI por el inquisidor Antonio del Corro para acoger a los pobres enfermos de la villa.

En su fachada de gusto clasicista y decoración plateresca, cuenta con dos escudos blasonados relacionados con el fundador.

Castillo del Rey

El Castillo del Rey de San Vicente es uno de los mejores ejemplos de arquitectura defensiva de la región. Fue construido en el año 1210, tras la concesión de fuero a la villa de San Vicente de la Barquera por Alfonso VIII, aunque se le supone un origen más legendario a mediados del siglo VIII, cuando el rey asturiano Alfonso I realizó la primera repoblación de la villa.

Tras ser restaurado cuenta actualmente con una exposición permanente sobre la historia y naturaleza de San Vicente, con piezas y documentos históricos de la villa.

Convento de San Luís

Este monasterio fue construido en el siglo XV bajo el patronato de la casa de Guevara y la advocación de San Luis. De su fábrica original se conserva una gran parte de los muros, ábsides, bóvedas y los arcos góticos rodeados de una espléndida y cuidada vegetación, con algunos árboles singulares que le dan un particular encanto.

Regido por frailes franciscanos, entre sus paredes se hospedó Carlos I en el año 1517 cuando llegó a España para ser coronado rey.

Muralla

La antigua villa medieval de San Vicente de la Barquera contaba con un completo recinto fortificado, constituido por el Castillo y la muralla que rodeaba la vieja ciudadela alta.

En la actualidad, se conserva la mayor parte del lienzo norte y parte del sur, con las puertas de Asturias o el Peregrino y la de La Barrera, así como la Puerta del Mar recientemente reconstruida.

Puente de la Maza

Importante obra de ingeniería medieval que comenzó a construirse en piedra en el siglo XV, sobre otro anterior de madera.

En su época, en la que llegó a contar con 32 arcos, fue considerado como uno de los puentes más grandes del reino.

El puente nuevo data de la época de Carlos III.

Torre del Preboste

Robusto torreón que flanquea y defiende la Puerta de La Barrera o de Santander.

Según la tradición, fue sede del preboste, oficial real para la recaudación de impuestos en la Edad Media. Posteriormente desempeñó la función de Cárcel Pública de la Villa.

Hospital de la Concepción

San Vicente de la Barquera, que fue un importante punto del Camino de Santiago en la ruta costera, contó con numerosos hospitales y albergues para los peregrinos.

En el Hospital de la Concepción, construido en los siglos XIV-XVI, encontraron refugio y asistencia los caminantes que utilizaron la primitiva ruta de la costa en busca del sepulcro de Santiago, los cuales en su camino hacia occidente atravesaban la muralla por la conocida como Puerta del Peregrino.